Esta semana hemos aprendido que hay veces que nos sentimos muy molestos por distintas causas:
-Cuando nos molesta una mosca pesada.
-Cuando nos hablan mucho y queremos hacer nuestro trabajo.
-Cuando nos persiguen corriendo todo el rato.
-Cuando llora mucho el hermano o la hermana.
Tras ver la imagen y escuchar la pieza musical surgieron enseguida distintos acercamientos para definir la emoción, que resumimos a continuación:
Después de comentar las palabras anteriores, concluimos que el gato estaba muy molesto, además estaba atrapado y no podía actuar, sentía mucho coraje.
LA IRRITACIÓN es el hecho de la repetición continua de algo que no nos gusta o molesta.
"Seguro que la primera vez que pasa el mosquito por nuestro lado casi ni
nos inmutamos. ¿Pero y cuando vuelve, y vuelve, y vuelve, y vuelve...?
¡Arrrggghhh!"
Explicamos que el mundo está lleno de
colores, olores, sonidos... y que algunos nos resultan tan molestos que
se nos instalan dentro y no podemos dejar de pensar en ellos. Cuando
nos irritamos, somos muy conscientes de nuestros sentidos. Por ejemplo, el ladrido de un cachorro puede despertar ternura, pero ¿y si no deja de ladrar en todo el día?
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Maestro Javi.